Dos niños muertos y 17 heridos tras Tiroteo en escuela de Minneapolis
Minneapolis. — La tranquilidad de la comunidad católica de Minneapolis se vio abruptamente interrumpida este miércoles cuando un hombre armado irrumpió en la Annunciation Catholic School, durante la celebración de una misa escolar, y abrió fuego contra los presentes. El ataque dejó un saldo de dos niños fallecidos y 17 personas heridas, la mayoría menores de edad. El agresor se quitó la vida en el lugar tras perpetrar la masacre.
Un ataque en plena ceremonia
De acuerdo con los primeros reportes de la policía local, el tiroteo ocurrió alrededor de las 10:30 de la mañana, mientras decenas de estudiantes participaban en la liturgia de inicio de clases. Testigos señalaron que el atacante, cuya identidad aún no ha sido revelada oficialmente, ingresó por una de las puertas laterales del templo escolar y comenzó a disparar indiscriminadamente contra los asistentes.
El caos se apoderó del recinto: maestros intentaron evacuar a los niños más pequeños mientras otros alumnos buscaron refugio bajo los bancos de la iglesia. “Fue un momento de terror absoluto. Nunca imaginé que algo así pudiera ocurrir en nuestra escuela”, relató entre lágrimas una docente que pidió mantener el anonimato.
Víctimas y respuesta médica
Las autoridades confirmaron que dos niños murieron en el acto, mientras que los 17 heridos —en su mayoría estudiantes de primaria y secundaria— fueron trasladados de inmediato a hospitales cercanos. El gobernador de Minnesota informó que, afortunadamente, todos los sobrevivientes se encuentran fuera de peligro y permanecen bajo observación médica.
Los nombres de las víctimas mortales no han sido difundidos públicamente, a la espera de que sus familias reciban acompañamiento y apoyo psicológico.
Investigación y seguridad
El jefe de policía de Minneapolis indicó en rueda de prensa que el atacante actuó solo y que no existen indicios de que el hecho esté vinculado a una red organizada. Sin embargo, la unidad de crímenes violentos del FBI se unió a las investigaciones para esclarecer el trasfondo del ataque y determinar si existían señales previas que pudieron haber sido detectadas.
La Arquidiócesis de San Pablo y Minneapolis expresó su “profunda consternación” y anunció que reforzará los protocolos de seguridad en todas sus instituciones educativas. “Este es un día de luto para nuestra comunidad. Rezamos por las familias de las víctimas y pedimos unidad frente al dolor”, señaló en un comunicado el arzobispo Bernard Hebda.
Reacciones políticas y sociales
El tiroteo ha reavivado el debate nacional sobre la proliferación de la violencia armada en Estados Unidos. Legisladores demócratas y republicanos expresaron condolencias, aunque discreparon en las medidas a adoptar. Mientras un grupo de senadores pidió reforzar el control de armas de fuego, líderes conservadores insistieron en la necesidad de fortalecer la seguridad en las escuelas mediante presencia policial permanente.
El presidente Donald Trump se pronunció a través de su red social Truth, calificando el ataque de “acto de cobardía” y asegurando que su gobierno “no escatimará recursos para proteger a los niños estadounidenses”.
Una comunidad marcada por la tragedia
La Annunciation Catholic School, fundada en 1923, alberga a más de 500 estudiantes de educación primaria y secundaria. La escuela había iniciado hace pocos días el nuevo año escolar, y la misa de este miércoles estaba dedicada a dar la bienvenida a los alumnos.
Ahora, la comunidad enfrenta un profundo duelo. Padres, alumnos y docentes se congregaron en las afueras del plantel para encender velas y rezar por las víctimas. “Lo que ocurrió hoy nos cambiará para siempre, pero debemos mantenernos unidos”, dijo entre sollozos un padre de familia.
Con este nuevo episodio, Minneapolis se suma a la larga lista de ciudades estadounidenses golpeadas por la violencia armada en espacios educativos, un fenómeno que parece lejos de encontrar solución.